El Toyota Supra
es un símbolo de la industria japonesa del automóvil. Una auténtica bestia sobre ruedas que tiene millones de seguidores a nivel global. Cientos de miles de unidades vendidas alrededor del mundo y más de cuatro generaciones a sus espaldas consolidan al Supra como un referente de su competida (o más bien elitista) categoría. Más aún cuando todas las miradas están puestas en el proceso de transición a la movilidad sostenible. El incombustible deportivo japonés se mantiene con vida.
La entrada en escena de la quinta generación del Supra ha marcado un antes y un después en la historia comercial de este modelo. Y es que su desarrollo ha sido posible gracias a una alianza estratégica de Toyota y BMW. De manera paralela al desarrollo del nuevo Supra se ha dado vida al nuevo BMW Z4. Además, el nuevo modelo que ya podemos encontrar en los concesionarios luce las siglas GR. ¿El motivo? El nuevo Toyota Supra forma parte de la creciente familia de modelos GR (Gazoo Racing).
Tiene unas dimensiones compactas. El nuevo Toyota GR Supra mide 4,38 metros de largo. En su interior alberga un total de dos plazas. Sí, es un vehículo biplaza. Y a pesar de ser un coche de enfoque puramente deportivo, ofrece un elevado nivel de confort gracias a un amplio equipamiento en materia de confort, de seguridad y de conectividad. El maletero cubica un volumen de carga 290 litros.
Más allá de cualquier tipo de polémica que pueda haber con el nuevo Supra respecto a la colaboración de Toyota con BMW, en lo que no hay duda es en el número de adversarios a los que debe enfrentarse. Entre los principales rivales del nuevo Supra
se encuentran modelos tan interesantes (y exclusivos) como el Alpine A110, el Audi TT y el BMW Z4. Además, y aunque el posicionamiento de la marca sea totalmente distinto, el Porsche 718 también se postula como un competidor del modelo japonés.
La oferta mecánica del nuevo Supra está compuesta de manera exclusiva por motores de gasolina. Ahora bien, a pesar de todos los cambios que ha sufrido este modelo con la llegada de su última generación, no ha sucumbido a la electrificación. La versión de acceso presenta un motor de 2.0 litros de cuatro cilindros de 258 CV y 400 Nm de par máximo. Está asociado a una caja de cambios automática de ocho velocidades y un sistema de tracción trasera.
En su versión más prestacional equipa un motor de 3.0 litros y seis cilindros que desarrolla una potencia máxima de 340 CV y 500 Nm de par máximo. Se combina con una caja de cambios manual de seis velocidades y, de igual manera, presenta una configuración de propulsión trasera. Es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 4,3 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 250 km/h (limitada electrónicamente).
A diferencia de generaciones anteriores, el nuevo Supra no luce el sello «Made in Spain». Es más, el proceso de producción en serie tiene lugar en Europa. Más concretamente en unas instalaciones de Magna Steyr en Graz (Austria). En esta misma planta se fabrica también el mencionado BMW Z4.